Woody Allen nació en Brooklyn, Nueva York, en la primavera de 1952, cuando Allan Stewart Konigsberg, nacido en el Bronx el día 1 de diciembre de 1935, eligió ese nombre como seudónimo artístico; así presenta Eric Lax, biógrafo de Woody Allen, a este genio del cine norteamericano.
Showman, clarinetista de un grupo de músicos de jazz tradicional, guionista de radio y televisión, autor de teatro, actor y director de cine, ha dedicado su vida entera al séptimo arte.
Con sensibilidad, ingenio y humor, Woody Allen plantea las preguntas que tocan directamente nuestra condición de humanos. La vida, el sentido de la vida, la muerte, el amor, el sexo, la culpa, el pecado, la relación con los otros, el psicoanálisis, son abordados desde sesgos diferentes a través de su extensa filmografía.
Al tiempo que nos advierte que “la vida no imita al arte sino a la mala televisión”, definiendo así esta época de decadencia y pobreza en la que vivimos, es capaz de realizar una película como Midnight in Paris, en la que cierta reconciliación con la vida, el amor, el arte, la creación contrastan con la idea de que la humanidad no tiene arreglo, que "se trata de una banda de gente absurda, correteando sin ningún ritmo ni razón" que nos hace vivir en Whatever Works.
Para su participación en LangueLengue elegimos un texto del libro Sin Plumas, que figura bajo el título: “Si los impresionistas hubieran sido dentistas (Una fantasía que explora la trasposición de temperamentos)”. Se trata de una de las cartas de Vincent Van Gogh a su hermano Theo que Woody se dio en imaginar así:
Querido Theo:
¿Me tratará bien la vida alguna vez? ¡Estoy loco de desesperación! ¡Me retumba la cabeza! ¡La señora Sol Schwimmer quiere demandarme porque he hecho su puente tal como lo sentía y no para que se adaptara a su ridícula boca! ¡Eso es! ¡No puedo trabajar por encargo como un vulgar comerciante! ¡Decidí que su puente debía ser enorme y protuberante, con grandes dientes explosivos abriéndose paso en todas direcciones como un incendio! ¡Y ahora ella protesta porque no le cabe en la boca! ¡Es tan estúpida y burguesa que me gustaría pegarle! Intenté encajar por la fuerza el falso paladar, pero sobresale como una araña de luces. Aún así yo lo encuentro hermoso. ¡Y ella dice que no puede masticar! ¡Qué me importa a mí si puede masticar o no! ¡Theo, yo no puede seguir así mucho más tiempo! Le pregunté a Cézanne si estaría dispuesto a compartir el consultorio conmigo, pero está viejo y enfermo, y no puede sostener los instrumentos y hay que atárselos a las muñecas, de manera que le falta precisión y cuando entra en una boca se carga más dientes de los que salva. ¿Qué puedo hacer?
Vincent
Woody Allen, Sin Plumas. Edit. Tusquets.
Erik Lax, Woody Allen, La Biografía. Edit. B Primer Plano.